Las cuestiones del sexo y de la sexualidad despiertan muchas emociones y mucha angustia en todos nosotros porque conforman una cuestión que no dominamos plenamente y que nunca dominaremos del todo. El problema de la sexualidad es, seguramente, uno de los temas más complejos en la vida humana, hasta el punto de que, muchas veces, se opta por no resolverlo con razones y dejar que cada uno encuentre su solución espontáneamente. Ésta no parece ser, desde luego, la solución óptima.
La moralidad o inmoralidad de los actos y de las relaciones sexuales han sido analizadas a lo largo de la historia desde diversos tipos de teorías: las éticas naturalistas, con su enorme influjo que llega hasta nuestros días; las éticas racionalistas, que surgen alrededor del siglo XVII; y las éticas de la responsabilidad, nacidas a finales del siglo XIX. Las tres éticas conviven hoy, por lo que en la charla pretendo realizar un breve recorrido histórico por dichas distintas visiones, porque sin perspectiva histórica las cosas son siempre mucho más difíciles de entender y de aceptar. Intentaré acabar haciendo una breve reflexión sobre la ética y la homosexualidad.