La historia del Movimiento Obrero es una historia de liberación. Y un aspecto que debería ser central, hoy y de cara al futuro, en cualquier proyecto político liberador es el del trabajo digno.
Porque la forma en que hoy se concibe y organiza el trabajo es una de las causas fundamentales del empobrecimiento que sufren tantas personas y familias, como también lo es del profundo daño y deshumanización a que se está sometiendo a las personas en nuestra sociedad.
Y porque el movimiento obrero ha tenido como un elemento central cambiar esa realidad del trabajo, para devolver al trabajador/a la dignidad que le corresponde como persona, y para organizar de forma más justa y humana la vida social.
En la historia del movimiento obrero ha sido central lo que un teólogo brasileño denomina “liberar el trabajo de la esclavitud economicista”.