La reconsideración de los orígenes del cristianismo está de máxima actualidad, como lo ponen de relieve películas y libros, que se convierten en best-sellers. Obras, carentes de todo rigor, se aprovechan de la gran ignorancia existente sobre estas cuestiones en la opinión pública, pero también manifiestan la extendida sospecha sobre la verosimilitud de lo que se considera la versión tradicional que la Iglesia da de sus propios orígenes.

El tema tiene repercusiones muy notables tanto sociales como eclesiales. La mirada al pasado siempre se realiza desde preocupaciones y perspectivas del presente, y según se reconstruya el proceso de su surgimiento el cristianismo estará más o menos abierto a los cambios históricos, se entenderá prevalentemente como un baluarte a la defensiva o como un movimiento integrador .Los estudios actuales ponen de manifiesto que el cristianismo primitivo era muy plural y que el surgimiento de la proto-ortodoxia fue el resultado de un proceso muy complejo, en el que entraron en juego factores sociales de diverso tipo.

En la actualidad el estudio del cristianismo no puede prescindir de la literatura apócrifa, de la que existen ahora ediciones accesibles y de calidad. Se trata de una literatura muy amplia y diversa, que plantea muchos problemas de interpretación, que puede contener tradiciones de Jesús independientes de los libros canónicos, pero que, sobre todo, amplía y enriquece enormemente nuestra visión del cristianismo de los orígenes.

En el proceso de surgimiento del cristianismo como entidad sociológica y teológicamente diferenciada del judaísmo, la constitución de un canon de libros sagrados propio y diferente de la Biblia hebrea resultó un paso decisivo. ¿Cómo fue este proceso? ¿qué significó? ¿qué problemas plantea el cierre de un canon de libros sagrados?